Pensé que era una estafa. Ahora tengo cinco pares.
Esta historia fue compartida por Chloe.
De la duda a la devoción con zapatos barefoot asequibles
En agosto de 2023 descubrí por casualidad un reto de salud llamado AB30 de Heart and Soil, justo después de leer el libro de Dr. Paul Saladino sobre alimentación basada en animales, que me resonó muchísimo.
Estaba en una etapa de probar cosas nuevas, y al ver un anuncio de Saguaro en mi feed pensé: ¿Por qué no probar los zapatos barefoot?
Para ser sincera, lo primero que pensé fue:
“Esto debe ser una estafa. Ningún buen zapato barefoot cuesta 60 dólares.”
Pero me dije: en el peor de los casos, perdería 60 dólares.
Spoiler: no era una estafa. Fue un cambio total—sobre todo para alguien como yo, comenzando una transición a los zapatos barefoot para principiantes sin saber lo diferente que sería.
Pies pequeños, gran cambio – Zapatos barefoot para niños
Pedí un par para mí y otro para mi hijo de 5 años.
Desde entonces, no ha usado otra cosa.
“Solo quiere usar zapatos barefoot. Han durado increíblemente bien—¡ya estoy por comprarle el tercer par para invierno!”
Verlo caminar tan naturalmente me hizo dar cuenta de lo mucho que el calzado moderno ha distorsionado el movimiento natural del cuerpo. Y yo no era la excepción.
Ahora que lo pienso, la diferencia entre zapatos barefoot y zapatos tradicionales es como la noche y el día.
Los zapatos normales me provocaban dolor en el arco, apretaban los dedos y afectaban mi postura—cosas que yo creía normales.
Con los barefoot, mis dedos tienen espacio por fin, y ya no sufro de fatiga o desequilibrios.
De probar a entrenar – Mis zapatos barefoot favoritos para entrenar
Al principio los usaba solo en el día a día—y noté la diferencia de inmediato.
Luego los llevé al gimnasio… después a correr.
¿Ahora? No me pondría un zapato tradicional ni loca.
“Sin dolor en el arco. Sin ampollas. Sin torceduras. Solo fuerza y comodidad.”
Por curiosidad, probé otras marcas de barefoot (mucho más caras). Pero sinceramente… ninguna se compara con Saguaro.
“Volví corriendo a Saguaro.”
Mi cuerpo se transformó, paso a paso
En este último año he aprendido muchísimo sobre salud del pie y desarrollo corporal.
Es impactante lo lejos que estamos de cómo deberían funcionar realmente nuestros pies.
Mis dedos pequeños solían estar torcidos hacia un lado y con durezas, y pensaba que era algo natural.
Resultó que simplemente eran malos zapatos.
La transición a los zapatos barefoot para principiantes puede parecer rara al principio, pero en mi caso, literalmente cambió cómo se comportan mis pies.
“Ya no tengo dolor. Mis dedos tienen espacio. Y me siento conectada con el suelo.”
Después de todo lo vivido—desde entrenamientos hasta el uso rudo de mi hijo—puedo decir que esta es mi reseña no oficial de los zapatos Saguaro: asequibles, duraderos, cómodos… y realmente transformadores.
Ya no es una prueba: es un estilo de vida
Ahora tengo:
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3 pares de Saguaro para el día a día y el gimnasio
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1 par de botas barefoot impermeables (honestamente, los zapatos más cómodos que he usado para hacer senderismo—¡incluso en terrenos mojados y desiguales!)
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1 par de sandalias tipo slides
Y sí, soy de esas personas que intenta convencer a todos de probar barefoot.
“Lo que empezó como un pequeño experimento, hoy es mi forma de vivir.”
Y seguimos adelante
Mi hijo pequeño solo ha usado Saguaro—y así quiero que siga.
Caminamos juntos, corremos carreras… incluso participamos en el HYROX Auckland con ellos puestos.
Estoy emocionada por ver qué lanzará Saguaro próximamente.
Ya no soy solo una clienta—
Soy una fiel seguidora del barefoot.
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